HIROKI RAMOS NAKO
Mukashi, Mukashi (hace mucho tiempo) es una frase que la comunidad nikkei peruana suele asociar a una persona en particular: Pepe Cabana Kojachi, el cuentacuentos que adoptó el Kamishibai en nuestro país. Con motivo de su reciente documental «Mukashi Mukashi en la ruta del Kamishibai, Japón», Nikkei Plus se reunió con él para que nos cuente acerca de este y su experiencia en el Kamishibai en general.
Lo que inició como un proyecto audiovisual que iba a retratar la técnica del Kamishibai y cómo este funciona se fue transformando en un documental acerca de este arte desde el punto de vista de los propios japoneses. Así, Cabana se propuso alzar sus voces, pues para él ‘’es importante conocer lo que para ellos significa’’. Esta idea surgió a partir del sentimiento del narrador oral de que ‘’hay mucho entusiasmo por el Kamishibai en el mundo, pero dentro de este hay cosas que se dejan de lado’’. Piensa pues, que algunas personas que usan este teatro de papel no toman en cuenta cómo se hace en su país de origen.
ENCONTRAR AYUDA EN TODAS PARTES
El documental no hubiera sido posible sin Christian Zevallos Nakandakari pues, como comunicador y realizador audiovisual, tomó un papel importante en el filme. Pepe Cabana comentó sobre él que fue vital para la decisión de hacer la película y que ‘’fue la persona indicada para el proyecto’’. Chikako sensei a la que él aprecia inmensamente, pues se encargó de la coordinación de los contactos en Japón.

El cuentacuentos está agradecido por haber recibido apoyo de distintas fuentes, sin el cual el documental no hubiera sido igual. El financiamiento de Kyodai para los boletos para el viaje a Japón fueron clave no solo para llegar a este país, sino para darse cuenta de que su sueño sí podría hacerse realidad. ‘’Si no hubiera pasado eso no me hubiera animado’’, dijo. Además, llegando contó con personas de la colonia peruano japonesa para darle alojamiento temporal o pagarle el transporte
DESPUÉS DE LA FILMACIÓN
El proyecto se vio, como muchos otros, enfrentado a la pandemia, la cual complicó su conclusión. Sin embargo, gracias a una convocatoria por parte del Ministerio de Cultura para apoyar a gestores culturales que fueron afectados por la coyuntura, se logró dar a cabo la postproducción y finalmente se terminó este año.
Agradecido es la palabra que puede describir a Pepe Cabana Kojachi con respecto a «Mukashi Mukashi en la ruta del Kamishibai, Japón», pues es consciente que no todos pueden lograr lo que él ha tenido. Siempre durante la realización del documental tuvo la mentalidad de que ‘’la oportunidad tiene que aprovecharla al máximo’’. Ahora él es no solo el mayor exponente del Kamishibai en el Perú, sino un ejemplo de lo que la comunidad nikkei puede conseguir cuando se une por un propósito.